MIEDO

Sentir miedo... miedo de verdad... No miedo de lo que no ves, de lo que no controlas... pánico, sentir lo frágil que eres en ese momento, vivir una situación que se te escapa de las manos, inesperada. Notar como la realidad supera a la ficción. Lo ves en el momento exacto, te paralizas, el corazón se acelera, pero la mente es rápida, no se activa la histeria y el pánico, se piensa frío, se sopesan todas las posibilidades. Tus gestos parecen tranquilos, no se traspasa tu miedo, aparentas total control sobre la situación, como si nada pudiera asustarte, pero tiemblas por dentro. Saber que todo depende de tu reacción, de saber controlar tu la situación y no al revés. Cualquier mal gesto, una palabra no acertada puede desencadenar en algo terrible... es una sensación aterradora. Es como dejar de respirar, hasta que todo acaba... y por fin puedes volver a respirar.